El arquitecto y escultor Manuel Tolsá llevaba tres
años en la Nueva España cuando recibió el encargo de realizar una escultura
ecuestre en honor al Rey español Carlos IV.
Tolsá, tenía la encomienda de realizar la escultura más
grande que pudiera fundirse y que en su momento fue el monumento de bronce más
grande del continente.
Después de un largo proceso de creación, la inauguración de
la escultura fue el 9 de diciembre de 1803. El destino de " El
Caballito" fue el Claustro de la Universidad, que se ubicaba en el predio
de la actual Suprema Corte de Justicia de la Nación y que, en nuestros días,
ya no existe.
Posteriormente, durante la época en que la Ciudad de México
buscaba extenderse hacia el poniente el bronce fue llevado al cruce del Paseo
de Bucareli (Antes Paseo Nuevo) y la Avenida Juárez (antes del Calvario).
El Caballito se convirtió en un punto de referencia de la
capital. Bordeada por el Toreo, la naciente colonia Tabacalera, el creciente
comercio en Bucareli, y la llegada del tranvía eléctrico.
En 1979, autoridades del Departamento del DF, del
Instituto Nacional de Antropología e Historia y del Instituto Nacional de
Bellas Artes determinaron que el caballo realizara su última cabalgata. El 27
de mayo, la escultura fue retirada del emplazamiento que tuvo durante 127
años, y “empaquetada”.
El 28 de agosto, la escultura fue inaugurada en la
plaza bautizada con el nombre de su autor, Tolsá, en la calle Tacuba; donde se
encuentra el Museo Nacional (Munal) y el Palacio de Minería.
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Fuente: http://www.excelsior.com.mx/comunidad/2013/10/11/922904